lunes, 20 de junio de 2016

Jun 02_16 Os doy una de las últimas oportunidades que tendréis, de conversión.

Jun 02_16 Os doy una de las últimas oportunidades que tendréis, de conversión. ImprimirE-Mail
Rosario vespertino


Temas: 

  • ¡Os amo tanto, Mis pequeños!, que os daré lo que necesitéis y como os dije antes, si vuestra oración viene de lo profundo de vuestro corazón, seguramente, obtendréis lo que necesitáis.
  • Protegeos, pues, en la oración, meditad el valor de vuestra alma y todo lo que podéis hacer con ella en la salvación de las almas, dejadMe a Mí, vuestro Dios, velar por lo que necesitáis en lo material.
  • Si hay Sabiduría en vosotros y humildad, arrepentíos y regresad a Mí, preparad vuestra alma a bien morir, el tiempo se acerca y muchos, muchos de vosotros no estáis preparados para el momento en que os presentaréis ante Mí.
  • Nadie puede amar a su prójimo, si no Me lleva en su corazón. Aún aquellos que no Me conocen o que no Me han buscado, Yo estoy en su corazón y Mi Amor actúa en ellos y tendrán su momento para conocerMe y agradecerán, de corazón, el que Yo haya vivido en ellos, aun sin conocerMe.
  • Mi Hija, la Siempre Virgen María, en cada Aparición, cuando llevaba Mis Designios Divinos, os pidió el rezo del Santo Rosario; si lo rezarais de corazón y todos unidos, destruiríais, inmediatamente, el poder de satanás.




Mensaje de Dios Padre y Nuestro Señor Jesucristo a J. V.




Primer Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: ¡Os amo tanto, Mis pequeños!, que os daré lo que necesitéis y como os dije antes, si vuestra oración viene de lo profundo de vuestro corazón, seguramente, obtendréis lo que necesitáis.

Hijitos Míos, así como vosotros ahorráis moneditas de diferentes tamaños y de diferentes valores, así, también, podéis ayudar con vuestras oraciones, dirigidas al Reino de los Cielos, para que éstas se derramen hacia vuestros hermanos, después de que Yo las haya recibido.

Mis pequeños, os he explicado antes, que lo que importa en la oración, es la intencionalidad.

Toda oración, lleva una intención. Si vosotros oráis con el corazón, con una intención muy buena y ayudando fuertemente a vuestros hermanos, estad seguros de que Yo la escucharé y que recibirán vuestros hermanos, lo que vosotros estáis pidiendo.

Hay otros que desperdician su tiempo, creen que deben hacer cosas muy grandes para ser escuchados, y con ese pretexto, no hacen nada, no dan nada, no dan fruto, porque no oran, porque no interceden, en resumen, porque no aman.

Vosotros tenéis a diario, alrededor del Mundo, infinidad de ocasiones para orar por vuestros hermanos, que no, necesariamente, sean los que viven en vuestro hogar o los que vosotros veis a vuestro alrededor, que os ayudan o que recibís sus servicios, como ir a comprar al súper, ir a la escuela, cuando os subís a un camión. Vosotros estáis en contacto continuamente, con hermanos vuestros y de muchos de ellos, quizá, conocéis sus necesidades.

Veis en noticieros, periódicos, medios de comunicación, lo que hermanos vuestros están padeciendo alrededor del Mundo. Si, realmente, vosotros, orarais de corazón y usarais vuestro tiempo para ayudar a vuestros hermanos, tened por cierto, que no terminaríais en un solo día, en pedir por todos vuestros hermanos que necesitan de Mi Ayuda y eso, ciertamente, os atraería infinidad de Bendiciones, a vosotros y a los vuestros.

No dudéis en pedir cosas grandes o cosas pequeñas, Yo puedo ayudar a vuestros hermanos con lo que necesitan y, aunque, variadas sean sus necesidades, Yo, como Creador, puedo ayudarles en lo que se necesite para que salgan adelante en sus problemas.

Os he dicho que vosotros deis el primer paso y Yo haré lo demás. Que vuestro amor hacia vuestros hermanos os haga dar el primer paso para que intercedáis por ellos y veréis que no os fallaré. 

Confiad, confiad plenamente en Mi Amor hacia vosotros, Yo nunca Me taparé Mis Oídos para no escuchar por vuestras necesidades.

¡Os amo tanto, Mis pequeños!, que os daré lo que necesitéis y como os dije antes, si vuestra oración viene de lo profundo de vuestro corazón, seguramente, obtendréis lo que necesitáis.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Protegeos, pues, en la oración, meditad el valor de vuestra alma y todo lo que podéis hacer con ella en la salvación de las almas, dejadMe a Mí, vuestro Dios, velar por lo que necesitáis en lo material.

Hijitos Míos, la acción del Espíritu Santo, será muy fuerte en estos tiempos, pedidMe que estéis vosotros bajo Su Amparo, bajo Su Protección, bajo Su Sabiduría.

La tribulación, cada vez se irá acrecentando más. Vosotros mismos estáis viendo cómo se van haciendo bandos, aún dentro de la Iglesia y en la sociedad; unos pensáis de una forma, otros, de otra, unos preferís algunos guías, o gobernantes, otros, los atacan. Hay mucha diversidad de opiniones, pero no buscáis lo más valioso, que es la Sabiduría Santa, que solamente puede venir de Mí y es la que os va a unificar a todos vosotros.

Satanás va causando toda esta tribulación y vosotros os enfrascáis en ella y os olvidáis de Mí, no buscáis lo que sólo puede venir de Mí, que es, la Sabiduría Divina. 

Cada quien desea hacer su propia voluntad y seguir a quien le conviene, de acuerdo a sus intereses personales, que, en la mayoría de los casos, están errados, porque buscáis nada más por lo vuestro y no por las multitudes. 

Os falta tanta Caridad, Mis pequeños, tanto amor por el prójimo, tanto amor hacia Mí, vuestro Dios y Creador.

Satanás sabe bien cómo convenceros a todos para que os apartéis de Mí y que viváis en la mentira, porque, todo lo que os rodea, os he dicho, es pura mentira. 

La tribulación que lleváis en vuestro interior, es lo que está causando que vosotros no marquéis en vuestra vida una línea recta que os lleve hacia Mí y, si lo hacéis, satanás se encarga de distraeros y os olvidáis de llevar a cabo vuestra misión, por estar viendo por las cosas del Mundo, que muchas hay que os distraen de vuestra principal atención, que es el llegar a Mí y llevar a otros, también, al Reino de los Cielos. 

Mis pequeños, estáis en una guerra real contra satanás, contra sus potencias. Vuestra guerra, es espiritual, pero satanás os desvía a que lo veáis todo dentro de lo material y, así no os protegéis con Mi Sabiduría y vosotros os desviáis fácilmente.

La maldad es mucha, muy fuerte y vosotros estáis muy desprotegidos. Por ejemplo, por estar viendo lo material, a donde os lleva satanás, porque él, con sus compinches alrededor del Mundo, hace que se eleven o caigan los valores del Mundo y, con tan poca cosa, vosotros os distraéis, porque estáis viendo cómo vuestro dinero, vuestros ahorros, se van para abajo o se mejoran un poco, y ahí, simplemente con eso, que es una tontería, vosotros vais perdiendo vuestro tiempo y os enfrascáis, nada más, en buscar cómo cuidar vuestro dinero y vuestras pertenencias y lo que, realmente debéis buscar y cuidar, que es vuestra alma, no le hacéis caso.

Os he pedido tanto que Me pidáis el don de Discernimiento, que Le pidáis a Mi Santo Espíritu, que os guíe por los caminos de la Verdad y dejéis los caminos que van debilitando vuestra espiritualidad.

Meditad esto, Mis pequeños, entrad en vuestro corazón y, siendo honestos, haced un análisis de vuestra espiritualidad y veréis que dejáis mucho qué desear, por estar solamente protegiendo vuestros intereses materiales y no estáis protegiendo lo que más vale en vosotros, que es vuestra alma y lo que podáis hacer con ella.

Satanás conoce perfectamente vuestras debilidades y os desvía por ahí. Sois tan frágiles que con tan pocas cosas con que os desvía satanás, os olvidáis completamente de lo Mío y lo que puedo hacer por vosotros en vuestra alma. 

Protegeos, pues, en la oración, meditad el valor de vuestra alma y todo lo que podéis hacer con ella en la salvación de las almas, dejadMe a Mí, vuestro Dios, velar por lo que necesitáis en lo material, Yo os di el don de la vida, os di un cuerpo físico y os puse en un lugar físico, que es la Tierra, para que os desarrollarais aquí y os prometí velar por vuestros intereses, y vosotros debéis velar por Mis intereses, que es la salvación de vuestra propia alma y la de vuestros hermanos. 

Yo conozco perfectamente cómo actúa satanás y si Me lo pedís y si confiáis plenamente en Mí, Yo puedo velar, perfectamente bien y mejor, mucho mejor que vosotros, de vuestras necesidades materiales, físicas. 

Vosotros, os repito, debéis velar por vuestra espiritualidad y la de vuestros hermanos, esto es importantísimo que lo entendáis, Mis pequeños. Vuestro cuerpo, vuestra envoltura terrena, junto con todo lo terreno que tenéis a vuestro alrededor y que habéis usado para vivir en este Mundo, desaparecerá cuando regreséis a Mí, al Reino de los Cielos, vuestra alma llegará ante Mí, sin nada de lo físico o de lo que consideráis valioso, en estos momentos, dentro de lo material; estaréis ante Mí, dándoMe cuentas de lo que hicisteis en el ámbito de lo espiritual.

Meditad y buscad realmente el valor de vuestra misión y de vuestra existencia aquí en la Tierra y veréis que lo que os estoy diciendo, es realmente lo que debéis vosotros buscar y en lo que os debéis de concentrar.

Dejad que Mi Santo Espíritu, que está en vosotros y que habita en estos momentos, ya, en vosotros, os mueva hacia la Verdad. Nada os faltará, os he dicho, de lo que vuestro cuerpo necesita para vivir y, de hecho, Yo estoy más interesado en ello, puesto que si vuestro cuerpo muere, vuestra alma ya no puede misionar aquí en la Tierra; así que, Yo busco vuestra salud de cuerpo, vosotros buscad vuestra salud de alma y ayudad a vuestros hermanos, a que mantengan esa salud de alma, con la ayuda que les deis en lo espiritual.
Gracias, Mis pequeños. 

Tercer MisterioHabla Nuestro  Señor Jesucristo.
Sobre: Si hay Sabiduría en vosotros y humildad, arrepentíos y regresad a Mí, preparad vuestra alma a bien morir, el tiempo se acerca y muchos, muchos de vosotros no estáis preparados para el momento en que os presentaréis ante Mí.

Hijitos Míos, en la antigüedad, cuando conviví entre los hombres, les hablé en Parábolas en aquél tiempo a los que Me rodeaban, para que entendieran mejor lo que les quería decir, ahora, han pasado un poco más de dos mil años y en este tiempo os hablo directamente. 

Los tiempos han pasado, cuando empezaba Mi Evangelización hacia los hombres, algunos entendieron, otros, la rechazaron y en estos tiempos, vuelve a suceder lo mismo, por eso, ahora os hablo directamente, sin Parábolas, prácticamente.

Yo os he dicho que teniendo vosotros el libre albedrío, y al haberos dado más de dos mil años para que meditarais Mi Palabra, entendierais Mis Obras y Mi Donación por vuestra salvación, vosotros podríais estar, ya, más avanzados, espiritualmente hablando, para que escogierais lo que Yo os di, pero, por lo visto, cerrasteis vuestro corazón a todo lo que viene de Mí y, por eso, ésta Purificación, que os he venido anunciando, será para eliminar todas las almas necias que se cerraron a las Enseñanzas Divinas que se os dejaron para vuestra salvación.

Es una tristeza, Mis pequeños, porque una gran cantidad de almas Me niegan, a pesar de que muchas de ellas fueron Bautizadas, enseñadas a amarMe, cuando fueron pequeños, pero crecieron y en lugar de mejorarse y buscar con interés y con amor lo que Yo os había dejado, no solamente se olvidaron de ello, despreciaron todo lo que Yo os dejé y muchas almas, hasta atacaron y blasfemaron contra Mi Santo Nombre y, como os he dicho: creáis o no creáis, la Purificación se avecina para toda la humanidad y para el Universo entero. Todos, creáis o no creáis, seréis juzgados y estaréis ante Mí, vuestro Dios, pero, lo peor de todo, para estas almas necias e incrédulas, que muchas de ellas, hasta Mi Existencia niegan, será un golpe fuerte cuando lleguen ante Mí y es cuando se darán cuenta de su error, de su necedad, de su tontería. Querrán arrepentirse, pero ya no habrá tiempo para ello, porque, ya, estando ante Mi Presencia, sólo queda el Juicio que tendrá cada uno de vosotros. Un Juicio Justo, ante un Dios Justo.

¡Qué difícil será para muchas almas estar ante Mi Presencia, estar ante Quien negaron, blasfemaron e hicieron a un lado, estar ante el Amor de los Amores, estar ante el Dios que se hizo Pequeño para salvarles y no quisieron aprovechar todo lo que Yo os di!

¡Cuánto dolor presentarán estas almas, ante Mí!, ya no podrán hacer nada por su Bien, desperdiciaron todo el tiempo de su vida y se llenaron de maldad y, esa maldad los juzgará en ése momento.

¿Por qué no entendisteis Mis Palabras? ¿Por qué no aprovechasteis todas las oportunidades que os di para vuestra conversión? Entended, Mis pequeños, que sois Mis hijos, que sois Mis hermanos, que Yo Me di por cada uno de vosotros, por vuestra salvación, que Me costasteis Mi Sangre y Dolores Inmensos. Conoceréis todo eso, pero será ya, demasiado tarde.

Os digo todo esto, Mis pequeños, para ver si Mis Palabras, todavía tocan algún corazón y entiende antes de que os presentéis ante Mí.

El Juicio, es inexorable, lo podréis negar, pero existe y existirá para todos vosotros. Tarde o temprano os tendréis que presentar ante Mí, y si hicisteis el Bien y hubo siempre Fe en vuestro corazón, pasaréis la prueba, pero si Me negasteis y con ello creíais que vuestra vida iba a ser más fácil, porque evitaríais muchos compromisos, que sabíais o presentíais que debierais cumplir y no los cumplisteis, vuestra alma estará en un peligro inmenso de condenación eterna y, os vuelvo a repetir: lo creáis o no lo creáis, sucederá. Os doy una de las últimas oportunidades que tendréis, de conversión y de aceptación, de lo que os estoy diciendo que tendréis todos vosotros.

Tendréis una muerte, de la cual, sabéis que no os podéis escapar. Tendréis un Juicio, porque os presentaréis ante Mí, vuestra alma, estará ante Mí, para ser Juzgada, y tendréis vuestro premio o vuestro castigo y, de ellos, tampoco os podréis escapar.

Si hay Sabiduría en vosotros y humildad, arrepentíos y regresad a Mí, preparad vuestra alma a bien morir, el tiempo se acerca y muchos, muchos de vosotros no estáis preparados para el momento en que os presentaréis ante Mí.

No sé cómo hablaros, Mis pequeños, para que entendáis, no os puedo presionar, porque tenéis el libre albedrío, pero Mi Corazón Amoroso, por cada uno de vosotros, os puede perdonar si os arrepentís, pero debéis creer y aceptar de corazón, que Soy vuestro Dios, que Morí por vosotros y que quiero que resucitéis en Mí, para el Reino de los Cielos. Os lo pido por favor, Mis pequeños, Morí por cada uno de vosotros, derramé toda Mi Sangre por cada uno de vosotros, Me habéis costado demasiado cada uno de vosotros, y, ¿aun así, despreciáis el triunfo eterno que tengo para cada uno de vosotros?
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Nadie puede amar a su prójimo, si no Me lleva en su corazón. Aún aquellos que no Me conocen o que no Me han buscado, Yo estoy en su corazón y Mi Amor actúa en ellos y tendrán su momento para conocerMe y agradecerán, de corazón, el que Yo haya vivido en ellos, aun sin conocerMe. 

Hijitos Míos, Yo, vuestro Hermano Jesucristo, os puse el Ejemplo de cómo debéis actuar ante vuestros hermanos que os están atacando continuamente. Como os dije antes, se va separando ya Mi pueblo, el que continuará, del pueblo que no supo apreciar lo que se le dio.

Vosotros, los escogidos, tenéis muchos méritos y, por eso, seréis el resto fiel. Ciertamente, vuestros méritos, son el resultado de Mi Donación y de vuestra aceptación en recibir, con gratitud, lo que Yo hice por vosotros.

Todos vosotros, los escogidos, creéis en Mí, vuestro Dios Salvador, aceptáis Mi Donación por vosotros, agradecéis Mi Muerte por vosotros y esperáis vuestra resurrección, porque Yo Resucité para enseñaros que sí hay una resurrección, también, para aquellos que Me siguen.

Por otro lado, también tenéis méritos propios, porque amáis y en eso se resume todo lo que habéis hecho por vuestros hermanos. Porque amáis, reprendéis a vuestros pequeñitos, para que no  hagan el mal y que sigan en el Bien. Porque amáis, le dais de comer al hambriento y le dais de beber al sediento. Todas las obras de Misericordia vosotros las habéis vivido, porque amáis a vuestros hermanos, y, porque Me habéis amado primero a Mí, vuestro Dios. 

Nadie puede amar a su prójimo, si no Me lleva en su corazón. Aún aquellos que no Me conocen o que no Me han buscado, Yo estoy en su corazón y Mi Amor actúa en ellos y tendrán su momento para conocerMe y agradecerán, de corazón, el que Yo haya vivido en ellos, aun sin conocerMe. 

El Amor, solamente puede venir de Nuestra Santísima Trinidad y todas las almas que queden después de la tribulación, se amarán los unos a los otros, porque Mi Amor une y todos vosotros tenéis Mi Amor y os sentiréis como lo que sois verdaderamente, hermanos en Mí, vuestro Dios Jesucristo, vuestro Salvador; porque amáis, Me conoceréis y porque habéis amado, vuestro premio os espera.
Gracias Mis pequeños, por vuestro amor.

Quinto MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: Mi Hija, la Siempre Virgen María, en cada Aparición, cuando llevaba Mis Designios Divinos, os pidió el rezo del Santo Rosario; si lo rezarais de corazón y todos unidos, destruiríais, inmediatamente, el poder de satanás.

“Amaos los unos a los otros”, os pidió Mi Hijo, cuando dejaba la Tierra, cuando regresaba al Reino de los Cielos.

¿Por qué sois tan duros de corazón, Mis pequeños? Os peleáis por las cosas del Mundo y de ahí se toma satanás para que haya discordias entre los hombres.

Si vosotros meditáis con Sabiduría lo que han causado las guerras en el pasado, lo que estáis viviendo en el presente, todo es causado por lo material.

No os amáis, porque satanás está en medio de toda guerra, de problemas familiares, de problemas sociales. Si os unierais, como os he dicho, en oración y con una sola intención, la de destruir el mal que os rodea, lo lograríamos, porque, ciertamente, Yo estaría con vosotros ayudándoos. 

Os he dicho, Mis pequeños, muchas veces, que la unión os dará la Fuerza para destruir las fuerzas de satanás, su poder es limitado ante Mis Poderes Divinos. Mi Hija, la Siempre Virgen María, en cada Aparición, cuando llevaba Mis Designios Divinos, os pidió el rezo del Santo Rosario; si lo rezarais de corazón y todos unidos, destruiríais, inmediatamente, el poder de satanás.

Os  he dado el ejemplo de cómo David venció al gigante Goliat con una honda, un arma pequeña, insignificante, contra un gigante poderoso, muy fuerte y fue vencido, porque, ciertamente, Yo estaba dándole fuerza a David, el pequeño.

Vosotros sois como David, pequeños, insignificantes, débiles, pero tenéis ésa arma poderosísima, que es el Santo Rosario y muchas veces, a lo largo de la historia, habéis constatado, con ejemplos que se os dan, de cómo, el rezo del Santo Rosario, ha vencido las fuerzas de satanás en múltiples ocasiones, ya fuera en guerras, ya fuera en ataques directos, ya fuera a satanás, a través de otras personas, hermanos vuestros, que han sido instrumentos de él.

Si siguierais Mis indicaciones, Mis pequeños, y os unierais a rezarlo, con todo fervor, con todo vuestro corazón, destruiríais el poder de satanás y de todos aquellos que están con él.

Os he dado tanto para que lo podáis destruir, pero no os unís, porque no tenéis Fe, porque no tenéis confianza, porque no sois como niños, o porque, queréis seguir siendo manipulados y atacados por satanás, y eso sería una gran tontería de vuestra parte.

En vosotros está la respuesta para destruir su poder, Yo ya os di las armas, ya os he dado los Consejos Divinos que os pueden servir para que os liberéis de las ataduras de satanás. El Rosario está al alcance de todos vosotros, de grandes y pequeños, ¿queréis vencer a vuestro enemigo?, ahí está el Santo Rosario para que lo logréis, si queréis seguir siendo esclavos de sus ataques y de su maldad, seguid como estáis, pero, luego, no os quejéis Conmigo, de que Yo no os ayudo. Vosotros tenéis la respuesta a vuestros problemas.

Tomad o dejad Mi Ayuda, vosotros os podéis liberar, ya, en cualquier momento, todo depende de vosotros.
Gracias, Mis pequeños.

www.diospadresemanifiesta.com

Mayo 31_16 Vosotros no conocéis ni el día ni la hora de vuestro regreso a Mi Presencia.

Mayo 31_16 Vosotros no conocéis ni el día ni la hora de vuestro regreso a Mi Presencia. ImprimirE-Mail
Rosario vespertino


Temas: 


  • Seguid orando, Mis pequeños, ya el tiempo es breve. Muy, muy pronto se empezarán a ver ya los acontecimientos que enmarcarán el inicio de la gran purificación; no os preocupéis, os he dicho y gozad, gozad este cambio porque será para bien.
  • Hace tiempo os dije que, de todos los libros que hay en el Mundo, la Santa Biblia es el más importante de todos, y debiera decir el único que os va a llevar a encontrarMe y os va a llevar a vuestra salvación eterna.
  • Os he pedido también, varias veces, que hagáis todas las noches, antes de que os acostéis, un recuento de todo lo que hicisteis en el día, que pongáis vosotros mismos, en la balanza, vuestras obras buenas y las malas, como si estuvierais ante Mí, vuestro Dios.
  • Vosotros, los que estáis Conmigo, orad por vuestros hermanos, seguid orando con todo vuestro corazón y apresuradamente, el tiempo ya está sobre vosotros, los acontecimientos también, ayudaos los unos a los otros, protegeos los unos a los otros, en lo espiritual y en lo material.
  • Seguid adelante, Mis pequeños, ya falta poco para que termine la prueba y falta poco, también, para que recibáis las Bendiciones y regalos que tengo preparados como premio a vuestra fidelidad. 



Mensaje de Dios Padre y la Santísima Virgen María a J. V. 


Primer Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Seguid orando, Mis pequeños, ya el tiempo es breve. Muy, muy pronto se empezarán a ver ya los acontecimientos que enmarcarán el inicio de la gran purificación; no os preocupéis, os he dicho y gozad, gozad este cambio porque será para bien.

Hijitos Míos, en las Escrituras podéis leer que si los días no fueran acortados, hasta los justos se condenarían.

Mis pequeños, os he hablado muchas veces del poder de satanás. Para vuestras capacidades, él es muy superior a vosotros, si no estáis Conmigo pero, estando Conmigo, lo podréis vencer fácilmente, pero cuántos, cuántos de vosotros, de Mis hijos, a los que os he concedido el don de la vida, realmente estáis Conmigo.

Por eso estáis viendo tanta tribulación en todo el Mundo, tanta maldad, tanto error, tanto pecado, porque la gran, gran mayoría de vosotros, de vuestros hermanos, no estáis Conmigo, no estáis pidiendo Mi Protección contra las fuerzas de satanás, estáis queriendo luchar solos, es más, ni siquiera pensáis que hay  una lucha espiritual que existe, en realidad, en vuestro Mundo.

También podéis leer en las Escrituras, que la lucha, es contra espíritus, no tanto contra hombres. Ciertamente, la maldad de satanás, entra en el hombre y se manifiesta a través de él, pero es el espíritu inmundo el que entra en el hombre y hace que os ataquéis los unos a los otros, que perdáis la forma en que actuáis o debierais actuar, viviendo en el amor y en las Virtudes; y caéis en la maldad y en los vicios y, por eso, ahora se desarrolla en toda la humanidad esta maldad que ya se os había profetizado, en donde os atacaríais los unos a los otros, en donde vuestro Mundo, no tendría ya autoridades y se vendría la ley de la selva.

Estáis a punto de eso y, en algunos lugares, se está dando ya, Mis pequeños, ya no se confía en las autoridades, porque las autoridades ya han hecho pacto con el enemigo.

La única forma en que podéis vosotros protegeros, es estando Conmigo, ya no podéis acudir a las autoridades, porque ellas no os van a defender de aquel al que ellos protegen, que es al  mismísimo satanás.

Mis pequeños, os he dicho que debéis acentuar la oración, la vida en la Gracia, las Virtudes, si vosotros no estáis en estado de Gracia, por más que hagáis cosas buenas, no entraré en vosotros, porque Yo no puedo convivir en el mismo lugar donde está el enemigo. Si vosotros no estáis en estado de Gracia, todo lo que hagáis bueno, se desperdicia o se queda detenido hasta que vosotros os arrepentís y recibís la absolución de parte de un ministro Mío.

Cuántas cosas os he enseñado, Mis pequeños y las habéis pasado por alto, no os interesan. No queréis buscar perfección de vuestra espiritualidad y, al ver Yo esto, ciertamente, no os tomaré como buena semilla, para que vosotros empecéis un Nuevo Mundo.

Aquellos que han hecho méritos, que Me han buscado, que Me han respetado, que se han dejado guiar por Mis Leyes y Mi Amor y que han sido hasta blasfemados, atacados, despreciados, porque Me habéis buscado y que vivís para Mí, seréis tomados para iniciar una nueva generación de almas que Me aman, que Me viven, que Me han buscado y, ciertamente, que han recibido Mis Bendiciones, porque Yo cuido a aquellos que están Conmigo.

Os agradezco, Mis pequeños, vuestro pequeño amor, que, ciertamente, lo aprecio infinitamente y lo engrandezco por los Méritos de Mi Hijo Jesucristo.

Seguid orando, Mis pequeños, ya el tiempo es breve. Muy, muy pronto se empezarán a ver ya los acontecimientos que enmarcarán el inicio de la gran purificación; no os preocupéis, os he dicho y gozad, gozad este cambio porque será para bien.
Gracias, Mis pequeños. 

Segundo Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Hace tiempo os dije que, de todos los libros que hay en el Mundo, la Santa Biblia es el más importante de todos, y debiera decir el único que os va a llevar a encontrarMe y os va a llevar a vuestra salvación eterna.

Hijitos Míos, hace tiempo os dije que, de todos los libros que hay en el Mundo, la Santa Biblia es el más importante de todos, y debiera decir el único que os va a llevar a encontrarMe y os va a llevar a vuestra salvación eterna.

Os pido, Mis pequeños, que si no leéis y tomáis seguido de ella, vuestro alimento espiritual, lo empecéis a hacer. Tal va a ser la confusión, que si no estáis vosotros preparados por Mi Santo Espíritu, el gran engañador os llevará por caminos de error, pero, lo más importante, es que vosotros debéis ayudar a aquellos que serán apartados de la Verdad, que he dejado plasmada en las Sagradas Escrituras.

La boca habla de lo que están llenos el corazón y vuestra mente. Vuestros hermanos, muchos de ellos, buscarán alimento espiritual después de los acontecimientos que se darán y, por eso, os pido que estéis aprendiendo de las Enseñanzas, de las Palabras, Meditaciones y de tanto Alimento que os he dejado en las Sagradas Escrituras, para que lo deis a vuestros hermanos. Haced vuestras Mis Palabras, y Mis Enseñanzas de las Sagradas Escrituras, seréis un solo pueblo, un solo rebaño, un solo Pastor y con las mismas Enseñanzas, todos vosotros.

Los que no habéis tomado Mis Enseñanzas de las Sagradas Escrituras, no os podéis dar cuenta del Alimento tan rico que de ahí podéis sacar, máxime si sois ayudados por Mi Santo Espíritu, a quien le deberéis pedir ésa ayuda, para que podáis entender y sacar el mayor provecho posible de lo que Yo os he dejado y que Mi Hijo vivió para vosotros.

En las Sagradas Escrituras tenéis un Alimento Santo, Divino, profuso y profundo y a la vez sencillo para los que estáis Conmigo. Yo le doy a los que Me buscan, la Luz del Espíritu Santo, para que podáis entender todo lo que se os dejó en el Libro Sagrado.

Desperdiciáis vuestro tiempo cuando leéis otras cosas que no os servirán para vuestro crecimiento espiritual y, sobre todo, para que os preparéis para el gran cambio que se os avecina. Mientras más cercanos estéis a Mí, con Mis Conocimientos, con Mi Amor, con todo lo que podáis sacar de Sabiduría Divina de las Sagradas Escrituras, y si estáis llamados para empezar a formar parte del Nuevo Mundo, pondréis en práctica lo que ahí se os detalla, es Sabiduría Divina. Actuar, vivir lo que en las Escrituras está y, sobre todo, cuando en grupos lo viváis, es cuando empezaréis a gozar el Cielo en la Tierra.

Apropiaos de Mis Palabras, vividlas, transmitidlas, ésa es vuestra tarea en estos tiempos, tiempos de cambio, tiempos de una Nueva Vida, tiempos, en los cuales, Mi Amor deberá purificar todo lo Creado, porque todo fue afectado por satanás.

Vivid, pues, como hermanos, compartíos las Enseñanzas que cada uno de vosotros obtendréis de las Sagradas Escrituras. Cada uno de vosotros sois células del Cuerpo Místico de Mi Hijo y cada quien entenderá los diferentes pasajes que leáis, en una forma muy profunda y bella. Algunos de vuestros hermanos no entenderán todo y, así, os iréis compartiendo lo que Mi Santo Espíritu os permita entender para que lo compartáis con vuestros hermanos. Os dije alguna vez, que no a todos o prácticamente a ninguno, os he dado las capacidades para entender Mi Obra, Mi Sabiduría y Mi Amor. A muy pocos se os ha concedido esto, para que podáis explicar Mi Palabra y vivirla en obras como Mi Hijo lo hizo y, así, podáis ayudar a vuestros hermanos, a vivir, profundamente, la parte que os corresponda a cada quien, por ser células del Cuerpo Místico de Mi Hijo.

Eso va a ser el regalo que tendréis, también, cuando seáis juzgados y os ganéis el Reino de los Cielos. No os imagináis la dicha tan grande de las almas, en el Reino de los Cielos, del compartir lo que Mi Santo Espíritu permita que entendáis profundamente de los diferentes pasajes de las Sagradas Escrituras.

Vuestra vida, en lo particular ha sido diferente, en cada uno de vosotros, y Yo os tomaré, a pesar de que actuabais y vivíais en formas muy diversas, y así será en este tiempo, tiempo inminente de cambio.

AgradecedMe, pues, Mis pequeños, el que hayáis sido escogidos para este tiempo de cambio. AgradecedLe a Mi Santo Espíritu, las Enseñanzas que os ha dado, en particular, a cada uno de vosotros. AgradecedLe a Mi Hijo, que derramó hasta la última gota de Su Sangre para vuestra salvación.

Vivid, pues, como hermanos, gozad de las Enseñanzas que os doy y pedidLe a Mi Santo Espíritu que os dé, a manos llenas, de Mi Conocimiento, de Mi Amor, para que viváis, ya, el Cielo sobre la Tierra, en estos Cielos Nuevos y Tierras Nuevas que os daré.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Os he pedido también, varias veces, que hagáis todas las noches, antes de que os acostéis, un recuento de todo lo que hicisteis en el día, que pongáis vosotros mismos, en la balanza, vuestras obras buenas y las malas, como si estuvierais ante Mí, vuestro Dios.

Hijitos Míos, os he dicho que los Mandamientos que os di, son para evitar vuestra caída natural al pecado. Os he dicho también que satanás aumentará su fuerza de ataque contra vosotros.

Revisad y meditad cada uno de los Mandamientos, pedidLe a Mi Santo Espíritu, que os haga conocer todas las formas en que podríais vosotros errar y que eso os lleve a perder el estado de Gracia de vuestra alma. Satanás es muy astuto y os lleva por caminos del mal donde vosotros podréis creer que estáis en el Bien y vivís en un pecado grave sin siquiera daros cuenta.

Esto es muy grave, Mis pequeños, porque, en cualquier momento, podríais morir y os podríais condenar eternamente.

Os he pedido, también, varias veces, que hagáis todas las noches, antes de que os acostéis, un recuento de todo lo que hicisteis en el día, que pongáis vosotros mismos, en la balanza, vuestras obras buenas y las malas, como si estuvierais ante Mí, vuestro Dios. Que, con toda honestidad, pongáis, frente a Mí, la balanza, entre Yo y vosotros y, así, humildemente, os pongáis de rodillas ante Mí, Me entreguéis lo bueno y lo malo del día y, si lo malo sobrepasa a lo bueno, no dejéis ni un segundo más para arrepentiros de vuestros pecados y, Yo, tome en cuenta vuestro arrepentimiento, por si ésa fuera vuestra última noche y os mandara llamar ante Mi Presencia y ser Juzgados. Vosotros no conocéis ni el día ni la hora de vuestro regreso a Mi Presencia.

Debéis cuidar vuestra alma, como lo más preciado que tenéis. Os he dicho que, prácticamente, ningún alma, pasa directamente al Reino de los Cielos, viviendo una vida normal. Pecáis muchas veces, sin que os deis cuenta y, por eso, el que Yo os pida que todas las noches  hagáis un recuento de todas vuestras obras, eso va a hacer que, con la ayuda de Mi Santo Espíritu, repacéis lo que hicisteis en el día y que no os disteis cuenta y Yo os ayudaré a que los reconozcáis, para que no los volváis a repetir. 

Hay vicios o maldad, también, en vuestro corazón y, a veces, actuáis bajo ciertas circunstancias de una forma que no es buena para vuestra alma. Quizá, para vosotros, se ha vuelto ya normal, actuáis así, sin pensar, y no debéis nunca actuar así, Mis pequeños, debéis actuar conscientes de lo que estáis diciendo y haciendo, para que, primeramente, no Me dañéis a Mí y, luego, no dañéis a vuestros hermanos con lo que digáis y hagáis.

Tened mucho cuidado de vuestra alma, llevadla a la pureza, a la santidad, que es el resultado de la perfección de vuestros actos y ayudaos los unos a los otros, para que, cuando veáis que vuestro hermano esté errando o haya cometido alguna falta, ayudadle a crecer. Decidlo con cuidado, con amor, porque muchos de vosotros sois rudos para hablar con vuestros hermanos. 

Ved la Figura de Mi Hijo Jesucristo, para eso Lo mandé, Mis pequeños, para que tomarais de Él Su Presencia, Su Vida, la forma de Enseñar, la forma de convivir entre vuestros hermanos, como los de aquél tiempo, que, ciertamente, eran de carácter rudo, sin mucha educación. Vosotros debéis ser como Mi Hijo, delicado en Sus acciones, en Sus Palabras en Su forma de Enseñar, Paciente, Bueno, Caritativo, Amable, aún con aquellos que Lo atacaban y, sobre todo, llenos de Mi Santo Espíritu.

Buscad llevar la Paz a vuestros hermanos que, ciertamente, en estos tiempos, muchos de ellos la necesitan.

Vosotros, todos vosotros, necesitáis de Mi Sabiduría, de Mi Amor y, especialmente, aquellos que enseñaréis y que tendréis como tarea convertir a las almas, no impongáis nunca, enseñad, pero enseñad con amor.

Recibid, pues, Mis Bendiciones, Mis pequeños y todo lo que necesitéis y que vaya para el Bien de vuestros hermanos y para el Bien de vosotros mismos, pedídMelo, que Yo os lo daré. 

Os amo, Mis pequeños, sois Mis Cristos en estos tiempos, sois corredentores y es una Gracia muy especial, no la desperdiciéis, en lo absoluto.

Os amo, recibid Mis Bendiciones para el engrandecimiento de vuestra misión y para el buen cumplimiento de ella.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio. Habla la Santísima Virgen María.
Sobre: Vosotros, los que estáis Conmigo, orad por vuestros hermanos, seguid orando con todo vuestro corazón y apresuradamente, el tiempo ya está sobre vosotros, los acontecimientos también, ayudaos los unos a los otros, protegeos los unos a los otros, en lo espiritual y en lo material.

Hijitos Míos, estáis viendo la confusión por todos lados. Soy vuestra Madre, la Siempre Virgen María, que os protege, que os guía, en estos tiempos de tribulación. Todo esto que estáis viviendo, estaba profetizado, pero no a todos les interesó el conocer la Palabra Divina y no se protegieron.
En las Sagradas Escrituras, tenéis muchos ejemplos, en los cuales, aquellos que se interesaron en salir adelante de una situación, a veces fatal, pudieron sobrellevar la prueba y vencieron.

Las Vírgenes Prudentes, son un ejemplo que debierais tomar todos vosotros: estar esperando al Esposo, pero, sobre todo, amar al Esposo. 

Muchos de vuestros hermanos, ciertamente, han escuchado que ya son tiempos de cambio, en los que de alguna forma, se va a manifestar Mi Hijo pronto, y muchos Lo esperan, con gran amor hacia Él, como Dios, aún como Hombre, como Salvador, con una admiración y respeto al Hijo de Dios que os abrió las Puertas del Cielo con Su Donación.

Estas almas, son las que saben amar, las que se van a ganar el Premio por estar preparadas al cambio y, sobre todo, serán protegidas de la confusión.

Hay tantas almas que actúan solamente por curiosidad, escuchan que va a haber un cambio fuerte, que viene ya Mi Hijo, pero no toman en serio este acontecimiento tan importante y no se preparan.

Satanás está dando sus coletazos de ahogado, está tratando de destruir la espiritualidad de cuantas almas pueda pero, las almas, infinidad de almas, parece que no les interesa su futuro eterno, no se preparan, no se protegen, de tal forma, que son presa fácil, muy fácil para que satanás las destruya espiritualmente y, a veces, hasta físicamente y con toda seguridad, se condenarán.

Nuestro Dios y Señor y Yo Misma, vuestra Madre, os Hemos venido preparando, avisando, advirtiendo, de muchos años atrás, para estos momentos tan importantes para la humanidad pero, sobre todo, muy importantes para vuestra alma y, ¿cuántas almas se han preparado para ello?

Os he dicho que el resto fiel es muy pequeño, eso quiere decir, que  un gran porcentaje no están preparados para estos acontecimientos y, ciertamente, muchas almas se condenarán, porque no quisieron hacer caso de Nuestros Mensajes de Amor y de protección. Ciertamente, tenéis el libre albedrío y de toda la información que se os dio por años, para vuestro Bien, algunos, los tomasteis en serio y muchos, no lo quisisteis tomar para vuestra protección. Sois libres, vosotros escogéis lo que creéis que es bueno para vuestra alma y para vuestra vida sobre la Tierra, os ayudo a que entendáis lo que viviréis, pero si no os interesa escuchar y, sobre todo, llevar a cabo lo que os pido o lo que os sugiero, Yo no os puedo presionar.

Mi Padre, vuestro Padre, Me ha dado la Gracia de ayudaros en estos momentos de la humanidad, Yo, como vuestra Madre, os quiero llevar hacia el Bien Supremo, hacia vuestra salvación eterna, hacia vuestra santidad de vida, pero, pocos, pocos abrís vuestro corazón y aceptáis lo que se os da. ¡Qué tristeza Nos da, en el Reino de los Cielos, ver vuestro estado espiritual y vuestra, casi nula búsqueda de la perfección espiritual!

Se os advirtió por muchísimo tiempo sobre estos momentos que estáis viviendo y padeceréis, pero no quisisteis prepararos para salir avante de la prueba. Vuestro error, para la gran mayoría de vosotros, os costará la condenación eterna.

Mucho dolor causáis al Cielo, Mis pequeños, por vuestra necedad, por vuestra negligencia, por vuestra tontería, pero sois libres, escogisteis en libertad y veréis el resultado después.

Vosotros, los que estáis Conmigo, orad por vuestros hermanos, seguid orando con todo vuestro corazón y apresuradamente,el tiempo ya está sobre vosotros, los acontecimientos también, ayudaos los unos a los otros, protegeos los unos a los otros, en lo espiritual y en lo material.

Que la Gracia de Nuestro Dios y en Su Santísima Trinidad y Mi Amor de Madre, quede con todos vosotros. 
Gracias, Mis pequeños.

Quinto MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: Seguid adelante, Mis pequeños, ya falta poco para que termine la prueba y falta poco, también, para que recibáis las Bendiciones y regalos que tengo preparados como premio a vuestra fidelidad. 

Hijitos Míos, se os ha dicho que la Purificación vendrá por catástrofes naturales, y es una forma, Mis pequeños, de ayudaros, aunque sea, así, fuerte, a que regreséis a Mí, porque, en el momento de la prueba, en el momento del dolor, en el momento de la angustia, el alma, instintivamente, busca su protección y en ése momento acudís a Mí, vuestro Dios, el Único que os puede salvar y proteger. Es una Gracia muy grande que os voy a dar, todavía, para que Yo pueda recuperar muchas almas.

¿No os dais cuenta, con esto, Mis pequeños, cuánto os amo? Un padre o una madre, actúan, desesperadamente, cuando ven la vida de sus hijos en peligro, Yo estoy actuando, prácticamente, de la misma forma, al ver vuestra necedad, vuestra indolencia, vuestra mediocridad, en el resguardo de vuestra alma.

Cuando estéis ante Mí, os daréis cuenta del valor de vuestra alma pero, para muchos, ya será demasiado tarde, porque os condenaréis. Vuestra alma es valiosísima y por eso satanás os la quiere quitar, la quiere destruir, la quiere atormentar eternamente, es el tesoro  más preciado que tenéis y no lo habéis sabido apreciar.

Vuestra alma está llena de capacidades, capacidades infinitas, que todavía no se manifiestan, porque estáis en la prueba, una prueba de Fe y de Amor hacia Mí, vuestro Dios. 

Ciertamente, vuestro cuerpo, envoltura afectada por el Pecado Original, no permite que vuestra alma actúe libremente y vuestras capacidades se liberen y las gocéis. Es este vuestro regalo en el Reino de los Cielos, ya sin la cárcel, que es vuestro cuerpo, vosotros gozáis, inmensamente, en el Reino de los Cielos, vuestras capacidades espirituales.

Ciertamente, después de esta Purificación, os he dicho, vuestro cuerpo, vuestra cárcel temporal, va a sufrir modificaciones favorables y dejará que vuestra alma pueda manifestarse más plenamente y gocéis de las capacidades que Yo le di a vuestros Primeros Padres, este será un regalo para aquellas almas que confiaron en Mí, que Me amaron, que mantuvieron una Fe a toda prueba. Son tantos los regalos con que os tengo que premiar a vosotros, los que os mantendréis firmes en la prueba y sobre todo, agradeciendo, de todo corazón, todo lo que Yo he permitido en vuestra vida y lo que permitiré en ésos momentos, que os llevarán a un Bien Superior.

Me dan lástima vuestros hermanos, los que no han querido venir a Mí, los que no han querido aprender de Mis Enseñanzas, los que han equivocado el camino y han hecho su propio camino, pero Soy un Dios Justo y Yo tengo que premiar a los que respetaron Mis Leyes y Mi Amor, que las siguieron con todo fervor. No le puedo dar igual al bueno que al malo, al hijo obediente, que al desobediente.

Seguid adelante, Mis pequeños, ya falta poco para que termine la prueba y falta poco, también, para que recibáis las Bendiciones y regalos que tengo preparados como premio a vuestra fidelidad. 

Protegeos los unos a los otros, amaos los unos a los otros, vivid como verdaderos hermanos en Cristo Jesús, Mi Hijo. 

Os Bendigo, Mis pequeños y pedidMe lo que necesitéis para vuestra perfección espiritual
Gracias, Mis pequeños.

www.diospadresemanifiesta.com